¿Pero cómo iba a estar en la selva? ¡Nooo! Mi Lola no es así, Lolita es una tigresa de ciudad… La magia de las divertidas y sugerentes ilustraciones de Vera Galindo llenan un álbum que nos habla de respetar a los animales y a la naturaleza. ‘Lila y Lola’ es una historia que edita Apila Ediciones y que te tocará el corazón, porque querer a alguien es aceptarlo como es.
¿Cómo nace este proyecto? Vera Galindo: “La idea partió de un boceto que hice un día donde dibujé un tigre en la selva. Después del tigre dibujé una niña y le puse una correa, como si lo estuviera sacando a pasear. Todo esto sucedió en un momento de vacaciones, sin pensar mucho ni buscar ningún resultado. Ni siquiera me pregunté por qué había hecho a un tigre de “mascota”, salió así. Ese dibujo lo guardé, como otros tantos, pero se quedó de alguna manera en mi subconsciente. Ese mismo año pinté un mural de un tigre, inspirado en ese mismo y más tarde hice unas pegatinas, de un tigre también. Casi un año después, en una semana más tranquila de trabajo en la que estaba revisando bocetos viejos, volví a reencontrarme con la imagen inicial y ahí fue dónde comenzó todo”.
¿Qué encontrarán los lectores en sus páginas? “Los lectores encontrarán color, texturas y sobre todo, muchas contradicciones. Es un álbum donde hay que estar muy atento a palabras e imagen, no solo hay que leer únicamente los textos, ya que si no, cambiaremos totalmente el significado”.
¿Qué dirías que tienen de característico tus ilustraciones para este libro? ¿Qué hay de nuevo o diferente con respecto a otros trabajos? “En este proyecto quería trabajar con una técnica manual, aunque luego me llevaría todo a digital para mezclar y componer -nos cuenta Vera Galindo-. Quería trabajar con collage digital y darle un aspecto más caótico en ciertas páginas. Quería que la textura fuera muy importante, que las líneas se salieran de la figura, que tuviera un toque manual e imperfecto que le diera mucha naturalidad. Quería hacer lo que me apeteciera y disfrutar experimentando”.
“Iba a jugar con diferentes papeles también y con todo lo que hiciera falta para que la ilustración fuera lo más expresiva posible. Era un experimento que me apetecía mucho hacer y en un momento en el que tenía bastante tiempo para experimentar. Fue un proyecto personal y me apetecía pasármelo bien, que se publicara o no ya sería cosa del futuro. Creo que por esto puede diferenciarse con proyectos anteriores bastante en estilo. Es más manual, con más texturas, más expresivo y despreocupado con las formas… Me gustó tanto el proceso y el resultado que en otros proyectos estoy jugando con técnicas similares”.
¿Con qué técnicas trabajaste? “Comencé trabajando con acrílicos, pintura plástica, lapiceros y rotuladores. Compré papeles con diferentes texturas y creé las mías propias, como los imperfectos lunares del vestido de Lila o el pelaje de Lola -asegura Vera Galindo-. Trabajaba las ilustraciones por partes para poder darles más tamaño, Lila iba por un lado, Lola por otro, las plantas o elementos del espacio por otro… Después escaneaba todo. Así me permitía jugar con el tamaño y probar diferentes composiciones en digital, con Procreate, que fue donde compuse todo y añadí algún trazo o detalle más”.
Háblanos un poco del uso del color en este libro. “El color para mi es un punto muy importante siempre en mis proyectos. En “Lila y Lola” todo parte del amarillo anaranjado, rojo y morado. Lola es amarilla anaranjada, el pelo de Lila Morado y su vestido, rojo a lunares, que es el mismo rojo con el que “domestica” a Lola al ponerle el pañuelo. Serán los tres colores principales que siempre destacan y van siendo acompañados por diferentes paletas de color, según estemos en la ciudad o en la selva”.
Háblanos un poco del proceso de realización de este libro. “Como te contaba antes, casi un año después de hacer ese dibujo, en una semana más tranquila de trabajo en la que estaba revisando bocetos viejos, volví a reencontrarme con la imagen inicial. Esta vez la vi de una manera completamente diferente, me di cuenta de que esa imagen contaba mucho sin necesidad de ninguna palabra. Era un tigre “domesticado”, tenía una correa, pero estaba en la selva. ¿Habían ido a buscarlo? ¿O lo estaban devolviendo? ¿Por qué esa niña estaba ahí?”, afirma Vera Galindo.
“Comencé a darle vueltas a la idea. Estaba claro que no iba a dejar acabar el libro con el tigre “atado”. Pero también estaba claro de que ese tigre, bueno, tigresa, tenía que pasar por la ciudad en algún momento, por eso de que llevaba correa. No me pareció muy difícil imaginar cómo podría ser la personalidad de Lila: una niña, un poco caprichosa por cierto, que piensa que le está haciendo un favor a su queridísima tigresa llevándola a la ciudad. ¿Pero cómo no le va a gustar vivir en la ciudad? Lila no es mala persona, pero tampoco se ha parado demasiado a intentar entender a Lola”.
“Me di cuenta de que ese boceto podía acabar en un álbum y personalmente, me apetecía hacer algo diferente. Llevaba una temporada en la que había estado trabajando mucho en exterior, en muralismo y lo que más me apetecía era llevar un poco de técnica manual y textura, porque la temática además, también me lo pedía”.
“También tenía un objetivo respecto a la ilustración y su unión con el texto: tenían que ser en cierta manera “independientes” -continúa Vera Galindo-. El texto va todo el rato contradiciendo a la imagen. De esta manera, si solo lees el texto, el álbum acaba de otra manera. Si solo lees la imagen, lo entiendes más o menos. Pero cuando lees juntos texto e imagen, comprendes la historia totalmente. Me parecía muy interesante el hacer al espectador estar atento a las imágenes en un álbum en el que hablo precisamente de lo contrario, de no prestar atención”.
“También preparé un booktrailer. Me parece a día de hoy, que todo está en redes, muy importante el poder presentar el libro de manera digital. Y qué mejor que con una animación. Los personajes están animados frame a frame en Procreate a 6fps y montado y animado posteriormente en After Effects.
¿En qué trabajas ahora? ¿Algún proyecto nuevo? “Ahora mismo estoy entre talleres en colegios e institutos, algún proyecto de ilustración, diseño y animación y sacando tiempo, como puedo, para dar forma a un par de proyectos personales que espero puedan transformarse en álbum pronto. ¡Ojalá!”.