Géraldine Alibeu y “El gigante del pantano”: “Creo que las ilustraciones de este libro representan el mismo universo gráfico que hay en mis otros libros, es mi universo”

Géraldine Alibeu y “El gigante del pantano”: “Creo que las ilustraciones de este libro representan el mismo universo gráfico que hay en mis otros libros, es mi universo”

El Gigante del pantano vive solo, en el fondo de una ciénaga oscura. Es un grandullón que tiene los dientes negros y las uñas carcomidas, un comedor de niños pegajoso, cubierto de musgo verde y setas azules. Cuando llueve, atrapa a los niños que chapotean en los charcos y les come los pies. En el pueblo todo el mundo lo sabe: es imposible tratar con el Gigante del pantano.

OQO editora nos trae “El gigante del pantano”, una historia de Richard Marnier que ilustra Géraldine Alibeu. Con ella contactamos y le pedimos que nos hablara de algunos aspectos de este libro. Sus palabras directas se complementan con las declaraciones en torno a este trabajo que encontramos en la página web de la editora.

“El Gigante del pantano es diferente; es el que nadie comprende, el que da miedo. Es un ser complejo, un personaje poderoso e introvertido, prisionero de sus miedos y de la mirada de los otros”, describe el escritor, Richard Marnier, quien, para auxiliarlo, ha creado una Camila que representa “la fuerza de la vida: espontánea, inconsciente y generosa”.

El calor y afecto que transmiten estas palabras -que leemos en la web de OQO editora- aparecen perfectamente plasmados por Géraldine Alibeu, quien aporta colores y formas agradables a las conversaciones que los vecinos mantienen sobre el Gigante, las cuales, hasta la mediación de Camila, se representaban teñidas de negro chapapote y morfología tenebrosa.

Alibeu representa esos diálogos en forma de bocadillos, propios del cómic, un género al que recuerda este tercer trabajo para OQO de la ilustradora francesa. “Richard Marnier, el escritor, me propuso su texto hace algunos años -nos cuenta Géraldine-. Empezamos a hablar sobre su historia, que era algo diferente del texto final. Empecé a hacer algunos bocetos, y mostramos nuestro proyecto a algunas editoriales; después, trabajamos de nuevo en el proyecto”.

La ilustradora francesa destaca que esta colaboración le ha permitido una renovación gráfica, al trabajar con el gouache y con una nueva paleta de colores. “Es la primera vez que realizo un álbum con esta técnica”, subraya Géraldine. La decisión de utilizar el gouache se debe a que el resultado de su textura se parece mucho a la que se obtiene con los rotuladores “Posca”, que la ilustradora lleva a todas partes para firmar dedicatorias.

En cuanto a los colores utilizados, al principio seleccionó algunos “Posca”, pero luego decidió adaptar su paleta de pintura al color de los rotuladores, con los que llevó a cabo los detalles, mientras que utilizó el pincel para los fondos y la ambientación.

Para Alibeu, esta es la primera vez que colabora tan estrechamente con el escritor del cuento, con el que no dejó de intercambiar impresiones, debido sobre todo a que hay mucho de Richard Marnier en la historia y, especialmente, en sus dos personajes protagonistas.

“Creo que las ilustraciones de este libro representan el mismo universo gráfico que hay en mis otros libros, es mi universo, “mis” personajes, pero, debido a que la técnica es tan diferente, al igual que los colores también, las imágenes pueden parecer más brillantes, el ambiente es más suave de lo habitual”, nos cuenta la ilustradora francesa.

Sobre la publicación de sus libros en otros países, como es este caso en España, Géraldine asegura que está realmente feliz con este extremo. “Desearía poder hablar español y hablar con mis lectores españoles”, asegura.