La Central de Diseño (DIMAD) del Matadero de Madrid acogerá entre el 16 de septiembre y el 2 de Octubre la exposición colectiva de homenaje “El Políptico de los Iluminados. Un viaje por el legado de El Bosco” coincidiendo con la recta final de la exitosa retrospectiva del Museo del Prado. La muestra se acerca al autor flamenco desde el punto de vista de la ilustración española actual, para mostrar el legado de su estilo 500 años después.
Esta exposición, comisariada por el ilustrador Celsius Pictor, pretende servir de homenaje al autor holandés mostrando la influencia que todavía ejercen sus obras 500 años después en el trabajo de los ilustradores actuales.
El trabajo de El Bosco era ya entonces más cercano a un encargo de ilustración que a la concepción moderna de artista, tal y como expresó el dibujante Max en una de las charlas de presentación del cómic sobre El Bosco encargado por el propio Museo del Prado. Esa idea de ilustrador como comunicador es la que pretende trasladar esta muestra, que será itinerante.
Entre los autores participantes se encuentran ilustradores consagrados y referentes como Pep Carrió y autores con una carrera todavía corta pero muy intensa como David de las Heras, Santiago Morilla, Ana Bustelo, Raquel Fernández, BYG, Celsius Pictor, Eduardo Martínez, Miguel Pang, Iratxe Lopez, Maguma y Manuel Marsol. Entre todos reúnen en su curriculum varios premios de ilustración nacional e internacional, exposiciones en México, Bolonia, Emiratos Árabes o la India, así como su inclusión durante varios años consecutivos en el Catálogo Iberoamericano de Ilustración y trabajos realizados para más de 20 países.
El trabajo de El Bosco es de tal complejidad y hermetismo que 500 años después sigue fascinando a miles de personas en todo el mundo, como demuestran las más de 400.000 visitas a la magnífica exposición del Museo del Prado en poco más de 3 meses. La muestra, que se podrá ver en Matadero coincidiendo con las dos últimas semanas de la del Prado, reúne piezas realizadas especialmente para la ocasión inspiradas en el trabajo de Hyeronimus Bosch y desde el punto de vista del ilustrador como transmisor de una idea.
Según Celsius Pictor, comisario y secretario de la Asociación de Ilustradores de Madrid, “la labor del ilustrador es más cercana a la de un periodista que a la de un artista. Su trabajo consiste generalmente en comunicar un mensaje dado por alguien aportando su experiencia y conocimientos artísticos sin que ese mensaje se pierda. En esto consistían los encargos que también recibía El Bosco. La idea de artista nacería poco después ya con el Renacimiento”.
