June es la protagonista de esta historia y está predestinada a convertirse en la princesa Tótem. En lugar de quedarse meditando, decide seguir su intuición. Saldrá de su aislamiento en palacio para buscar su camino y encontrar una manera alternativa -y personal- de cumplir con la meta que le han impuesto. El autor, Sébastien Perez, nos transmite con esta metáfora la importancia de buscar la libertad y la identidad de cada uno. Esta emotiva historia de leyenda cuenta con las maravillosas ilustraciones de la francesa Justine Brax, con la que hemos charlado un poquito más sobre este libro que edita Edelvives. Además de estar editado en cartoné, es un álbum ilustrado de gran formato que cuenta con un quinto color que hace las ilustraciones aún más llamativas.
¿Cómo nació este libro? Justine Brax: “Trabajamos regularmente con Sébastien, era nuestro nuevo proyecto”.
¿Qué nos encontramos dentro de este nuevo libro? “Queríamos acercarnos al término de los clichés de género pero de una manera ligeramente diferente, así que hemos producido con Sebastien Pérez tres álbumes cuyos héroes son niños pequeños, ‘La princesa Tótem’ es la primera parte de los próximos tres álbumes cuyas heroínas serán niñas pequeñas”.
¿Qué pensaste después de tu primera lectura de la historia de Sebastien? “Es un trabajo en equipo, hacemos lecturas, luego relecturas, intercambiamos, y luego trabajamos juntos la relación texto imagen”, nos cuenta Justine Brax.
¿Cómo fue tu trabajo de documentación para este libro? “Como en todos mis libros, primero investigo e investigo, me inspiré mucho en los motivos del art nouveau, el arte moderno de principios del siglo XX”.
Cuéntanos algo sobre las ilustraciones de este libro. “Es un trabajo largo y difícil, primero tienes que encontrar una idea, luego preparar e investigar. Después tienes que pensar en el diseño y la organización de la composición general -nos cuenta Justine Brax-. Elige un encuadre con Sebastien. También decidimos sobre el colorido universo del libro eligiendo una gama, que se adaptará a este libro. También decidí darle un poco de lado asiático en sus orígenes, pero sigue siendo lo suficientemente loco como para no ser demasiado identificable”.
¿Con qué técnicas trabajaste? “Trabajo en collage y con una superposición de pintura acrílica. Después termino con lápiz de color, con rotulador fino y termino en Photoshop”.
Cuéntanos algo sobre el color. es muy singular… “De hecho, para cada álbum, elegí una gama de colores específica. Benjamin Lacombe, que es el director artístico del libro, quiso realzar el conjunto con un rosa fluorescente para que sea claramente visible”, asegura Justine Brax.
¿Qué has aprendido trabajando en este libro? “Como todo libro, es una especie de parto, un proceso creativo por lo que avanzamos un poco más cada vez”.
¿Qué ha sido lo más difícil de trabajar en este libro? “Mi gran dificultad en general es el trabajo de construcción del dibujo el rigor anatómico. Tengo dificultades con esto. Me gusta la parte de la pintura y el color. ¡Lo que prefiero es cuando finalmente puedo pasar a crear los patrones!”
¿En qué trabajas ahora? ¿Algún proyecto nuevo? “Ahora mismo estoy trabajando en un libro que aborda el tema de los nativos americanos”.