Mamá’ es un libro de tapa dura con elástico, en formato acordeón vertical. Dos ilustraciones de 100×30 centímetrosque se despliegan para mostrar un mar de sentimientos, un recorrido por la vida, sus momentos. Con su autora, Sylvia Vivanco, charlamos un poquito más sobre este proyecto en las siguientes líneas.

¿Cómo nace este proyecto? Sylvia Vivanco: “La idea de este proyecto surgió en el 2012 al morir mi abuelita. Aunque era ley de vida, para mi madre fue muy difícil no tenerla tan cerca como siempre la había tenido. Entonces pensé que le regalaría un libro que pudiera reconfortarla a ella y quizás a muchas más personas que pudieran sentirse igual. Lo cierto es que nunca sacaba el suficiente tiempo para empezar a darle forma, pasaban los años, la idea me seguía pareciendo igual de maravillosa que el primer día (a veces cuando reposas las cosas tanto tiempo no te parece igual de buena que el primer día), pero no conseguía llegar a una imagen gráfica en mi cabeza que me convenciera lo suficiente como para sentarme a plasmarlo”.

“De repente en 2020 falleció mi madre, algo inesperado, y en medio de ese dolor, empecé a ver ilustraciones en mi cabeza, que eran parte de mi vida, de mis recuerdos con mi madre… Fue entonces que puse una lámina de 70×100 sobre mi mesa, encendí una vela y fue inevitable no llorar -confiesa Sylvia Vivanco-. Me puse a sentir cada trazo que hacía, cada símbolo que incluía. No era un proyecto en el que podía permitirme equivocarme y volver a empezar puesto que cada trozo que avanzaba tenía demasiada alma como para empezar de nuevo y sentir lo mismo para transmitir lo que quería contar. A mitad me atasqué. Me dio el miedo de ¨¿Y si me equivoco ahora?¨, ¨¿y si ahora pongo acuarela aquí y no queda como quería?¨… y mil dudas mas… lo dejé reposar y de nuevo agarré fuerzas para terminarlo sin pensar, simplemente dejándome llevar por lo que sentía y plasmando lo que mi corazón me iba indicando”.

¿Qué encontrarán los lectores en sus singulares páginas? “Un poema visual que se despliega para mostrar un mar de sentimientos, un recorrido por la vida, sus momentos. Un gran amigo me lo describió como una historia que se despliega para unir dos mundos. Un libro de pocas letras y un mapa al interior para aprender a nombrar lo que nos falta”, afirma Sylvia Vivanco

Háblanos del formato del libro. ¿Por qué así? “El libro es en acordeón porque quería una ilustración entera, como analogía a la vida. Mide exactamente lo que mide de ancho un pliego de imprenta, no quería unir y pegar trozos, tenía que ser todo una hoja. De principio a fin. Por un lado la vida en la tierra, la que hemos compartido juntas, la que está llena de recuerdos, de frases, de sensaciones… Por otro lado, el otro plano, lo que añoro. Su canción favorita transformándose en estrellas…” 

Y de la contraportada, que parece una dedicatoria, pero también es una historia… “Si, así es. No sabía cómo resumir mi libro en pocas palabras cuando todo el libro es un viaje de recuerdos, entonces la describí a ella, y si te fijas… es también la explicación de la portada. (Empieza en el mar, el faro de Maspalomas, las flores… y si miras la portada de muy lejos, es su cara, ves la cara de una mujer, con pelo corto) -asegura Sylvia Vivanco-. Todo el que la conoció sabe que disfrutaba de todo, de un paseo, de quedarse en casa, de un rayo de sol, del olor a tierra mojada y sonido de la lluvia. Enseñó a mis hijas a disfrutar de cada segundo que la vida nos regala… con ella por ejemplo, a pisar hojas secas”.

“A Mamá le gusta caminar hasta el faro todas las mañanas, y desde allí contemplar el mar. Le encantan las flores, de cualquier forma y de mil colores. Las plumas de los ángeles, el otoño y pisar hojas secas. A Mamá le gusta mirar al cielo, la noche y sus estrellas. A Mamá le gusta estar, porque cualquier momento… si es con ella, se convierte en mágico y especial.”

“La contraportada luego tiene una dedicatoria a mano. Fue una dedicatoria que encontré la semana que me atasqué con el proyecto. Fue una dedicatoria que me había escrito mi madre en el 2003 en el día de mi cumpleaños. No podía no ponerla. De alguna manera he sentido que este proyecto lo hemos hecho las dos juntas, así que yo le dediqué unas palabras, y estas, me las dedicaba ella a mí”, afirma Sylvia Vivanco.

¿Qué diríais que tienen de característico tus ilustraciones para este libro? ¿Qué hay de nuevo o diferente con respecto a otros trabajos? “Creo que en este proyecto por fin he conseguido ser yo. No había ilustrado antes así. La verdad siempre me habían pautado qué estilo ¨mío¨ querían, siempre andaba con el dilema de lo que quieres hacer, lo que otros quieren ver, lo que piensas que otros esperan de ti, que al final queda un resultado con el que no estás satisfecha. A veces el tiempo, a veces el cliente, lo cierto es que tenía muchos libros fuera, con muchas editoriales diferentes pero de ninguno me había sentido 100% orgullosa. En este proyecto que al final terminó siendo un autoregalo para llevar mejor mi día a día echándola de menos, el único cliente al que tenía que contentar era a mí, así que me dejé llevar por lo que sentía y conseguí sentirme bien en este estilo”, confiesa Sylvia Vivanco.

¿Con qué técnicas trabajaste? “Es mix media. Puedes encontrar lápiz de grafito, lápiz de color polychromos, acuarela, pastel, papel, tinta…”. 

¿En qué trabajas ahora? ¿Algún proyecto nuevo? “Acabo de terminar un proyecto con Nayra Suárez en el texto y yo ilustrando. Se llama ¿Dónde han ido los pingüinos? La verdad es un libro precioso rimado, os invito a echarle un ojo. Y estoy empezando a desempolvar todas las historias que tenía guardadas en un baúl y a darles forma. Ahora que me siento cómoda en este estilo, espero a final de este año sacar otro libro muy especial para mí”.