¡Oh, cielos! es un viaje celeste de poema en poema. El sol sale y el escenario se ilumina. Llovemos con las nubes, nos asomamos tras la tormenta con el arcoiris, descansamos hechos niebla sobre las colinas. Mientras, en el cielo, revolotean aviones y pájaros traviesos. Cuando el sol se marcha y baja la noche, el escenario cambia, pero la maravilla continúa. Las estrellas se hacen guiños y bailan por la Vía Láctea. La luna se empeña en ser exacta como un reloj y una estrella fugaz vuelve a atravesar el cielo demasiado rápido como para que nos dé tiempo a pedir un deseo. No importa: el sol está a punto de regresar. El mundo se prepara para recibirlo y que la función comience de nuevo. Con estas palabras nos presenta la editorial A fin de cuentos este libro, un trabajo de Xaviera Torres y Natascha Rosenberg. Con ésta última charlamos un poquito más sobre su trabajo en este proyecto.

Natascha Rosenberg

¿Cómo surge este proyecto? Natascha Rosenberg: “Teresa me escribió proponiéndome ilustrar las poesías de Xaviera. Hasta entonces sólo había ilustrado un libro de poesía y me pareció un reto interesante. Además siempre me gusta hacer cosas diferentes.

¿Qué te parecieron los poemas de Xaviera la primera vez que los leíste? “Admito que no leo asiduamente poesía. Lo hacía más en mi adolescencia y recuerdo que me atraían mucho los románticos: Byron, Shelley, Keats, Hölderlin, Baudelaire, Emily Dickinson… pero creo que el interés iba más unido a las vidas de los personajes que a la obra en sí. Eso y el peso que siempre producen en el corazón esos poemas. Cuando leí los de Xaviera me parecieron alegres y pensé que me hubiera gustado que de pequeña me hubiesen leído en la escuela estos poemas -confiesa Natascha Rosenberg-. Para mí es casi mágico que en unos pocos renglones se desarrolle toda una historia”.

Natascha Rosenberg

¿Es la primera vez que ilustras poesía? ¿Qué diferencias hay para tí respecto a otro tipo de textos? “Era el segundo libro de poesía que ilustraba y sí existe una diferencia al ilustrarlo. Para mí siempre son pequeñas historias independientes que hablan de temas diversos pero en este caso era diferente. Tenemos varios personajes diferentes que habitan el mismo lugar común, el cielo. El cielo es un escenario por el que van pasando sus diferentes habitantes, las nubes, el sol, la luna, las estrellas, lo pájaros, los aviones, el arco iris….y nosotros como los espectadores. Por eso en las ilustraciones tenemos en muchos casos un mismo personaje, una niña que contempla lo que ocurre”.

Natascha Rosenberg

¿Con qué poema del libro te quedas? “¡Es difícil elegir! Quizá porque de pequeña me daba miedo la oscuridad me gusta mucho la de “Noche suave”. Y también me gusta “De nube a niebla” (¡casi se merecen su propia historia esas nubes!)”, asegura Natascha Rosenberg.

¿Qué diríais que tienen de característico tus ilustraciones para este libro? ¿Qué hay de nuevo o diferente con respecto a otros trabajos? “Quería que fuesen unas ilustraciones “ligeras” y alegres. Así que decidí utilizar solo lápices de colores y ceras. Son materiales que me ayudan a simplificar, a no perderme en pequeños detalles. Y creo que le dan un tono naïf al libro. ¡O eso espero al menos!”

Natascha Rosenberg

¿Con qué técnicas trabajaste? “Casi todo es lápiz de color y ceras. Algunos fondos los hice con texturas en tinta y grafito que luego escanee. Pero hay muy poco retoque digital”.

Cuéntanos algo del proceso de elaboración del libro. “El proceso no difiere mucho del que uso para un álbum. Primero tengo que encontrar al personaje que nos va a llevar a través de la historia. En este caso no aparece siempre pero sí que debía encontrar a un personaje que contemplara todo lo que va ocurriendo y apareciendo en el cielo. Y aunque esto no lo tenía muy claro, al principio, Teresa me animó a que así fuera. Hay imágenes que las tenía muy claras desde la primera vez que leí la poesía y otras tardaron más en aparecer”.

“Que a Xaviera le gustasen las ideas a medida que iban surgiendo también fue una gran ayuda -continúa Natascha Rosenberg-. Luego pasé a hacer los bocetos y a colorear. A veces colorear antes de tener todos los bocetos me ayuda a desconectar y relajarme y no estar agobiada porque no he encontrado alguna imagen que me falta. Para la portada y contraportada me pareció interesante hacer el juego del cielo de día para la portada y el cielo de noche para la contraportada”.

¿En qué trabajas ahora? ¿Algún proyecto nuevo? “Actualmente estoy trabajando en el tercer título de una colección para Fleurus Editions, escritos por Paule Battault para niños muy pequeñitos sobre irse a dormir. Ya hicimos uno sobre el orinal y otro sobre el chupete que saldrán también próximamente en España. Y tengo otros dos proyectos sobre los que no puedo decir nada aún”.