Cada mañana la señora Marta sale y comprueba que el mundo está en su lugar: sus amigas en una terraza juegan a las cartas, la playa de siempre en el lugar de siempre, los niños se divierten en el patio de la escuela. El barrio de la señora Marta es un barrio como cualquiera, pero es también un barrio único en el mundo, porque es el suyo. Así nos presenta Alboroto Ediciones este libro, ‘Mi barrio‘. Un trabajo de María José Ferrada y Ana Penyas. Con ésta última charlamos un poquito más sobre este proyecto.
¿Cómo nace este proyecto? Ana Penyas: “Nace de la editora, Mónica Berna. Ya habíamos hecho un libro juntas, María José Ferrada y yo, el de ‘Mexique, el nombre del barco’, que tenía un tono totalmente diferente, porque iba sobre una historia traumática, de los niños que en el franquismo tuvieron que exiliarse a México, pero ya sentaba un precedente de que habíamos trabajado súper bien juntas, que había encajado muy bien el texto con la imagen, y con Mónica también. Entonces Mónica nos propuso un proyecto totalmente diferente, que de hecho partía desde otro lugar, que era a partir de unas imágenes que yo ya había producido, que tenían que ver con diferentes proyectos. Una serie que ya había hecho que se llamaba ‘Mis vecinos’, otra serie que presenté a un concurso…, bueno, todo eran escenas cotidianas de barrio. Partiendo de esas imágenes, a ella se le ocurrió hilarlas, y completar con otras imágenes, y crear, de ahí, una historia”.
“Tuvo mucho trabajo también de Mónica, de intentar hilar aquello. Yo hice primero las imágenes, y luego fue María José la que las hiló con un texto. Entonces fue un proceso muy extraño para un libro, porque también las imágenes partían de diferentes épocas, incluso de estilo. A lo mejor había imágenes que tenían cuatro años de diferencia entre una y otra. Entonces hubo algunas que las tuve que retocar, tuve que producir otras, entonces fue un proceso como súper anómalo”.
¿Qué encontraremos en sus páginas? “Es la historia de un día, podría ser, de una señora que se llama Marta, una señora mayor, que hace su día cotidiano de hacer diferentes tareas en su barrio. A través de ella vemos un retrato de ese barrio, en el que para en el parque, en la escuela, en la playa, en el médico, se para con unas vecinas… va por diferentes escenarios y vemos cómo ella es conocida en ese barrio, y a la vez que es una mujer mayor que está perdiendo poco a poco la orientación, o la memoria incluso -nos cuenta Ana Penyas-. Pero al final pasa que, al ser conocida en ese barrio, una niña la vuelve a guiar en el momento en el que se pierde. Al final lo que encontraremos es una reflexión, por un lado de la vejez, y por otro lado de las relaciones de barrio”.
“De la vejez, pues es un retrato de una mujer autónoma, que ha tenido una vida activa, que tiene amigas, conocidos… y por otro lado a mí me interesaba el origen de donde partían un poco estas imágenes que yo había creado previamente, y que venían a retratar un poco ese apoyo mutuo en los barrios, la convivencia, la pluralidad también de los barrios populares, y me interesaba poner en valor ese tejido social. Y ahí Marta nos sirvió como el hilo conductor para retratar eso”.
¿Qué te pareció la historia de María José la primera vez que la leíste? “Me encantó, porque me parecía todo un reto tener que hilar una historia partiendo de unas imágenes previas. Era una cosa un poco compleja, porque le dábamos muy poco pie a que ella inventara, pero lo hizo. A raíz de su texto yo hice alguna imagen más y las adapté al texto -afirma Ana Penyas-. Como siempre lo que escribe está lleno de una carga… desde lo simple pues tiene una carga emotiva y de discurso también súper potente”.
¿El libro refleja algún barrio real o elementos de algún barrio real? “Retrata varios. Yo soy de Valencia, aunque ahora vivo en Madrid. Los dibujos parten de cuando yo vivía en Valencia, y entonces por un lado retrata mi barrio, donde yo he crecido, que es el barrio de Benimaclet, también otro barrio marítimo que hay en Valencia muy conocido que se llama El Cabañal, alguna escena podría ser incluso del centro de Madrid, de algún viaje que yo hacía en esos años, pero básicamente son barrios populares donde sí existe un tejido social, no todo el mundo se conoce pero sí hay mucha gente que se conoce porque incluso algunos eran pueblos previamente, donde hay población envejecida, etcétera. No hay ni siquiera una edulcoración de las escenas de barrio, sino que son escenas cotidianas que se dan en esos barrios”.
¿Qué dirías que tienen de característico tus ilustraciones para este proyecto? “Para mí tienen de característico lo mismo que tienen mis trabajos cuando trato el tema del urbanismo, la ciudad, desde el humor… Que hay muchísimos personajes, porque quiero mostrar la pluralidad, porque me da la sensación de que muchas veces en los libros se excluye a mucha gente que sí existe en la vida real, gente migrante, a lo mejor otros cuerpos, incluso niños un poco más irreverentes dentro del punk, por ejemplo, o guiños incluso de movimientos sociales reales como la camiseta del top manta, pues siempre quiero dar un toque de realidad, ¿no? Porque muchas de las imágenes que salen son cosas que yo he visto, muchas de las personas son reales”.
“Por otro lado -continúa Ana Penyas– es uno de los proyectos más coloridos que tengo, porque suelo trabajar con una gama más pequeña, y también uno de los pocos proyectos que he hecho, a la hora de crear nuevas imágenes, pensando en un público infantil, que normalmente trabajo más para adultos”.
¿Con qué técnica o técnicas trabajaste? “La técnica es un poco la que utilizo siempre. Yo dibujo a mano, utilizo transferencia fotográfica a través de disolvente, y ese es el toque de collage que tienen las imágenes, y luego pues trabajo con lápices de colores, con tinta china en este caso, con gouache, con acuarela… Una mezcla de técnicas, y luego escaneo la imagen y con Photoshop pues ya retoco, o incluso añado color en algunos puntos. Pero hay muchos originales en el papel que se parecen mucho a cómo están en el libro”.
¿Qué dirías que has aprendido con este proyecto? “Pues una nueva metodología por lo que comentaba de que fue un proyecto muy extraño partiendo de imágenes que yo ya tenía. Entonces darle un sentido narrativo a imágenes que yo ya había hecho, eso fue un trabajo. También el trabajo en equipo, con la editora y con María José Ferrada, muy de tú a tú entre las tres, y eso me gustó mucho. En definitiva, cómo trabajar el libro desde otro lugar”, afirma Ana Penyas.
¿En qué estás trabajando ahora? ¿Algún proyecto nuevo? “Estoy con un cómic, que es un cómic para adultos. Llevo ya dos años con este proyecto, y trata sobre el tema del suelo en todas sus vertientes. Empecé con el tema del turismo en España, un poco historia del turismo, y a partir de ahí fui ampliando a diferentes temas que tenían que ver con el territorio. Y si todo va bien, saldrá en medio año aproximadamente”.
También podéis leer en el blog la entrevista con Ana sobre ‘Todas estamos bien‘.