Noticias
Daniel Montero Galán y ‘El gran Zooilógico’: «Cuando tuve un muestrario con varios especímenes, acordé un pacto con ellos: ya que ellos viven gracias a mí, yo quería vivir de ellos. Para llevar a cabo esta simbiosis, ideé un bestiario»

Lo que hemos tenido que reír y lo bien que lo hemos pasado husmeando en ‘El gran Zooilógico‘ de Daniel Montero Galán, publicado por Ediciones Jaguar. Ya tuvimos la suerte de coincidir en Madrid con él en persona, tras alguna entrevista virtual sobre su trabajo. Nos vimos en un antiguo mercado. Él estaba detrás del mostrador de un puesto, uno de pollos, pero pollos por allí, no había. Sí que había muchos seres mitoilógicos.
«En esta recopilación de seres utópicos y atípicos encontrarás muchos tipos de patas y picos. Unos son peludos y otros pelones, los hay aterciopelados, peliagudos, peleones; pero la mayoría no tienen un pelo de tonto, como los melones», dice Daniel en su página web. Nos hemos puesto el traje de aventura y nos hemos adentrado, eso sí, de la mano del mejor guía, en esta especie de selva/bosque/granja/casa/mar que conforman las páginas del libro.
Háblanos un poco del proceso de elaboración de este libro. «Desde que era una cría de animalote, cuando aún no tenía uso de razón (tampoco es que ahora la utilice mucho), he sido bastante observador y me gustaba mirar las musarañas. Tenía muchos pajarracos en la cabeza a los que contemplaba ensimismado. Con el tiempo, estos se fueron reproduciendo y se les fueron sumando todo tipo de criaturas, haciendo un gran estruendo entre graznidos, gruñidos, cacareos y alaridos. Así que decidí acallarlos en mi sesera, y sin perder los papeles, lo fui trasladando al folio para que allí tuviesen la voz cantante».
«Desde entonces no he parado de atrapar especies y especias mitoilógicas. Me sorprende que me quepan tantas dentro del cráneo, soy bastante cabezota, pero no cabezón. Mi mollera es como el cuerpo de la Chuskatrioska (Soviet matryoska), criatura que alberga en su interior dos salitas de estar, un cuarto de baño, tres habitaciones y varias camas nido donde incubar a sus polluelos».
«Cuando tuve un muestrario con varios especímenes, acordé un pacto con ellos: ya que ellos viven gracias a mí, yo quería vivir de ellos. Para llevar a cabo esta simbiosis, ideé un bestiario donde apareciesen catalogados estos seres y comencé a enviárselo a varias editoriales. Finalmente Jaguar se aventuró a acompañarme con las andanzas de estas criaturas de altos vuelos. Así, en noviembre del 2011, salió del huevo el Zooilógico que con el tiempo fue desapareciendo de las librerías. Por ello, en noviembre de 2015, vio la luz El gran Zooilógico».
Te recordamos detrás de un puesto en un mercado con alguno de tus seres mitoilógicos, en este zoo-libro, ¿cuántos estaban ya y cuántos han llegado nuevos? «En mayo del 2013 tuve el placer de participar en ‘Se Alquila / Mercado’. El proyecto ‘Se Alquila’ reúne a creadores en espacios en desuso. En su tercera edición abrieron los puestos abandonados del Mercado de la Cebada, en pleno centro de Madrid. Este mercado de abastos no dio abasto con la muchedumbre que visitó durante 3 días las obras de los más de 150 creadores e intérpretes que transformamos la galería comercial en una galería contemporánea».
«En mi caso, convertí el puesto nº 48, la antigua Pollería Marisa, en una Pajarería de Pajarracos, donde se exhibían bastantes de estas criaturas. El puesto llevaba unos 15 años cerrado así que, aparte de desempolvar recuerdos, también tuve que desempolvar su interior. Más que una pollería parecía una madriguera de Pielipelido (Mienudo mielenudo), la criatura más melenuda del Zooilógico, que a su paso va dejando un rastro de pelusas».
«Por aquel entonces ya estaba a la venta el primer Zooilógico, que contaba con un formato más pequeño (22×22, 5 cm). El gran Zooilógico, haciendo honor a su nombre, es de mayor tamaño (30×21, 5 cm). Aparte de la evidente transformación de dimensiones, para la que tuve que volver a maquetar todo el libro y la nueva imagen de cubierta, su interior también ha cambiado bastante. Incluye 32 páginas nuevas, con diez criaturas insólitas que sustituyen a otras que ya no me convencían. Así que no se trata de un libro nuevo, pero tampoco de una simple reedición del primer bestiario».
«Recientemente, en la galería Mad is Mad, se han exhibido algunos de los seres mitoilógicos que aparecen en el libro, junto a más de una treintena de nuevas criaturas que estuve estudiando para la ocasión. Estas criaturas ya existían antes del primer bestiario y se siguen y seguirán multiplicando. En el libro aparecen recopiladas una gran parte de ellas, pero el rico hábitat del Zooilógico abarca tanto espacio que no cabría en un bestiario».
¿Cuánto tiempo de campo lleva crear este zoo tan particular? «Tengo un estudio muy hogareño (trabajo en casa), así que me gusta salir a coger aire bien fresquito para inspirarme. Procuro llevar conmigo una libreta, por si me encuentro por el camino con alguna criatura mitoilógica, poder hacer un apunte rápido de su fisonomía. Después paso a limpio el dibujo y comienzo a observar sus rasgos físicos y particularidades, lo que me sirve para bautizarla, definir sus características y comportamientos, ilógicos sin duda. Por lo tanto, no es un libro de escritos que luego haya ilustrado, más bien lo contrario, es un libro de dibujos de Zooilogía que luego he descrito».
«El primer ejemplar que esbocé data de los años 80. Esta investigación me ha ido acompañado durante toda mi existencia y espero poder vivir rodeado de estas criaturas durante mucho tiempo».
Respecto a las ilustraciones, ¿sigues con tu estilo rectiforme espiraloide? ¿Hay algo nuevo respecto a trabajos anteriores? «Cada vez soy más rectiforme y con menos manchitas. Ahora trabajo más el volumen y trato de meter menos florituras. En El gran Zooilógico hay algunas criaturas antiguas y otras recientes, así que se puede percibir esta metamorfosis. Hay tres criaturas actuales a las que se les transparenta el interior, el Chupacabras (L. críptido decrepit), la Enervera lechera (Lacteum mortali) y el Cropardo (Mucus pringuis). Creo que cada vez soy más introspectivo».
Cuéntanos con qué técnicas has trabajado. «Procuro no usar mucho el ordenador, solamente cuando es imprescindible que me eche un cable. Suelo realizar la mayoría del proceso a mano (con ayuda del pincel). Para el 90% de las imágenes he utilizado pastillas de acuarela, que suelo mezclar con témpera blanca, rotuladores y tinta china. En las páginas de consejos sobre cómo criar seres mitoilógicos en tu casa también aparecen trozos de papel escaneados. Una vez digitalizadas las imágenes fui montando la maqueta. En este proceso me echaron una mano para no meter la pata. Es un libro en el que estuve omnipresente en toda su creación, ya que lo he ideado, diseñado, escrito, ilustrado y maquetado».
Al abrir las tapas de este libro y pasar sus páginas, si se escapa alguno de estos seres, ¿a cuál debemos temer más? «Hay varias criaturas que pueden resultar peligrosas, como el Revientalotodo (Quecaracabreo quetienes) que es la mar de agresivo y siempre nada a contracorriente, o la Bereberbenera (Abracadabrus cabestrus) que tiene muy malas pulgas. Hay otros seres con los que también hay que andarse con mucho ojo, como la Enervera lechera (Lacteum mortali) que da muy mala leche o la Mangarriana (Mangalaganga), criatura crujiente muy dura de mollera a la que se le suele ir la pinza».
¿El mejor para tenerlo de mascota? «Hay varios que pueden ser de gran utilidad, como la Rebanajita (Cortex multium) que con sus múltiples pinzas puede abrir cualquier envase (si le das la lata), o el Pipiripiolino (Pipiripipi poporopopo), voz cantante del Zooilógico. Como buen cantamañanas te puede servir de despertador, pues canta al amanecer para que ningún huevo se quede frito».
«Algunos son muy hogareños y se domestican fácilmente, como el Torcinito de cielo (Volatilix grasum) que su hábitat idóneo es dentro de un frigorífico, o el Sopapo (Pescaíto alajillo) al que le gusta ponerse tierno dentro de una olla. Pero antes de escoger cuál es el ser que mejor se adapta a tu hogar, has de tener en cuenta que su tamaño sea adecuado. Algunos son demasiado grandes para meterlos en una casa normal y otros minúsculos y difíciles de encontrar. A las criaturas mitoilógicas les gusta poder vivir a su aire, migrar y dar alas a su imaginación. El Zooilógico carece de barrotes que amansen a estas fieras».
¿Con cuál de ellos compartes afición? «Soy muy curioso y suelo husmearlo todo cual Tuerzuda (Torxis tuercum), por ello me encanta ponerme en la piel de otros, como al Metamorcillo (Bichejus miltrajeadum). Al igual que al Pajararrico (Pataletus detiqueta), me gusta asistir a banquetes para picotear, y ponerme las botas como un Zoopatero tres ojos (Pantunflo triocularis).
¿Cómo consigues mantener en pie ese zooilógico con un Engulleletras dentro? «Al Engulleletras (Empacherus delibirs) le encanta hacer sopas de letras y devorar textos, literalmente. Por fortuna es muy comodón y no se mueve de sus hojas, en las que ha ocasionado un gran destrozo y no ha dejado una palabra sin relamer, pues podría liarla muy gorda en las 120 páginas que tiene el bestiario. Es un libro muy sabroso de tomo y lomo, y da el cante hasta de canto. No le servirá de mucho a un biólogo para realizar sus estudios, pero le puede resultar de gran ayuda para calzar su mesa, si es que cojea».
¿Qué posibilidades ofrece el libro a los lectores? «Diversión. El primero que ha disfrutado he sido yo haciéndolo y creo que se nota. Es el libro que quería tener, tanto mi yo de hoy como mi yo de ayer, y es que tengo un niño interior muy exteriorizado. Creo que si un creador goza de su obra es más fácil que luego lo hagan el resto de personas. Lo recomiendo para todos los públicos, de 0 a 100 años. Los más pequeños y los menos jóvenes pueden imaginar más sobre estas criaturas y su hábitat, incluso seguir inventando nuevos seres».
«La parte didáctica radica en que invita al espectador a curiosear. En mi opinión la enseñanza debería girar en torno a las preguntas y no a las respuestas. Incitar a reflexionar cómo son las cosas y que cada uno saque sus propias tonteorías. Luego, claro está, dar la solución científica, pero no sin antes haber hecho el esfuerzo de imaginar. Además, es ideal para ejercitar los dos hemisferios de cerebro a la vez, al mostrar unos seres surrealistas junto a una descripción pseudocientífica pone a trabajar tanto el izquierdo como el derecho, es como ir al gimnasio de cabeza».
Cómic
COMICMED, el encuentro que conecta el cómic con el Mediterráneo

La Fundación Tres Culturas del Mediterráneo, con la colaboración del Polo Nacional de Contenidos Digitales del Ayuntamiento de Málaga, han celebrado la primera edición de COMICMED, un encuentro que ha abordado el mundo de la novela gráfica y el cómic producido o vinculado con el Mediterráneo.
La programación, plagada de importantes creadores del género, ha combinado conversaciones con autores, talleres prácticos para público infantil y juvenil, y una innovadora propuesta que fusiona cómic con música electrónica con aires marroquíes al ritmo de la DJ Hajar Lagranja.

El cartel de esta primera edición ha sido realizado por Nadia Hafid (Tarrassa, 1990), ilustradora de ascendencia marroquí cuyas obras han sido varias veces portada en ‘El País’, además de aparecer en artículos en medios internacionales como ‘The New York Times’, ‘The New Yorker’ y ‘The Washington Post’, entre otros. Su nuevo trabajo, ‘Mal olor’, recientemente ganador del premio Finestres, ha visto la luz en castellano este mes y los asistentes a COMICMED han podido tener acceso a el en primicia. Nadia protagonizó una de las mesas de este encuentro, en la que conversó con Javier Alonso, director del programa ‘Territorio 9’ en Radio 3.



Siguiendo con autores de gran nivel, el festival ha traído por primera vez a España a dos creadores que, sin ser de origen mediterráneo, acuden con una obra cuya temática está muy presente en este mar y que, además, entronca a la perfección con los valores que promueve Tres Culturas de solidaridad, diversidad, inclusión y esperanza. Se trata de Victoria Jamieson y Omar Mohamed, que conversaron sobre la historia que les unió: la multipremiada ‘Cuando brillan las estrellas’, inspirada en las vivencias del propio Omar Mohamed en los campamentos de refugiados de Dadaab, en Kenia.

También tuvieron cabida los cómics que dan el salto a la gran pantalla a partir del exitoso caso de ‘Robot Dreams’, el primer cómic de la escritora de libros infantiles Sara Varon que el director Pablo Berger plasmó en una inolvidable cinta que llegó a optar al Oscar como Mejor película de animación el pasado año. Ambos desgranaron los detalles de esta colaboración que ocupa un lugar de privilegio entre las producciones cinematográficas nacidas de un cómic.

Y si la historia de ‘Robot Dreams’ viajó desde Estados Unidos hasta España para llegar al celuloide, el mismo trayecto, pero a la inversa, es el que realizan las obras de Natacha Bustos (nacida en Ibiza en 1981, aunque malagueña de adopción) y Carmen Carnero (Málaga, 1983), dos españolas que triunfan en Marvel y DC. La primera de ellas con cómics como Moon Girl and Devil Dinosaur, fue elegida por Marvel como una de las ocho artistas más prometedoras de la próxima generación en 2020; mientras que la segunda trabaja para esta misma compañía en exclusiva desde 2018, donde fue incluida en 2019 en el programa de artistas de élite de Marvel ‘Stormbreakers’.


Igualmente por su importante proyección, destaca el reconocido dibujante e historietista Diego Galindo (Sevilla, 1978), que conversó con la profesora e ilustradora Cristina Peláez sobre su experiencia adaptando Stranger Things al cómic, explorando los retos y oportunidades de trasladar esta exitosa serie. Comentaron sus inicios, y Diego confesó que «siempre fue primero la imagen, el dibujo. Yo al principio miraba los cómics, más que los leía».

Por último, cabe mencionar a Wilfrid Lupano, (Nantes, 1971), con quien se analizaron libros como ‘La bibliomula de Córdoba’, del que es guionista, y en el que muestra el poder de la cultura y el conocimiento como barrera ante los totalitarismos. Wilfrid habló sobre el proceso de investigación y documentación para el libro. «Era difícil poner en imágenes un universo que no había sido representado. Era como poner una primera piedra», indicó. Lupano señaló el trabajo enorme de investigación que había realizado también el ilustrador, y apuntó a la idea de sacar a la luz temas como la arquitectura y también toda la producción de la Gran Biblioteca de Córdoba. «En occidente la construcción de Catedrales era un gesto económico y político fuerte. La construcción de Bibliotecas también lo era». Definió a ‘La bibliomula de Córdoba’ como una «mula movie», una road movie a ritmo de mula, en la que se expresa su amor a la cultura y los libros. «El libro es un objeto con una fragilidad increíble… y a pesar de todo, todo el saber ha llegado hasta nosotros porque ha habido personas que han hecho la conservación, las copias… Siempre algunas escapan hasta la civilización siguiente».


Además, fue uno de los protagonistas de los talleres infantiles a partir de su obra El lobo en calzoncillos en el apartado COMICMED KIDS, donde también se ofreció otro taller que aúna creación con nuevas tecnologías para la creación de videojuegos y uno para público adolescente en el que Natacha Bustos mostró cómo dibujar superhéroes.

En resumen, una programación diversa y heterogénea en la que se habló mucho de cómic, pero también de nuevas técnicas de creación, universos digitales y fusión con otras artes.
Cómic
Málaga se convierte en el centro del cómic mediterráneo con la primera edición de COMICMED

La Fundación Tres Culturas y el Polo de Contenidos Digitales de Málaga organizan la primera edición de COMICMED del 6 al 8 de marzo en las instalaciones de Tabacalera con la presencia de creadores como Benjamin Lacombe, Victoria Jamieson, Sara Varon, Pablo Berger, Nadia Hafid, Natacha Bustos, Wilfrid Lupano y Carmen Carnero.
La Fundación Tres Culturas del Mediterráneo, con la colaboración del Polo Nacional de Contenidos Digitales, del Ayuntamiento de Málaga, presenta la primera edición de COMICMED, un encuentro sin precedentes que abordará el mundo de la novela gráfica y el cómic producido o vinculado con el Mediterráneo.
La programación, plagada de importantes creadores del género, combina conversaciones con autores, tres talleres prácticos (para distintas franjas de edad: adultos, adolescentes y niños) y una innovadora propuesta que fusiona cómic con música electrónica con aires marroquíes al ritmo de la DJ Hajar Lagranja.

El cartel de esta primera edición ha sido realizado por Nadia Hafid (Tarrassa, 1990), ilustradora de ascendencia marroquí cuyas obras han sido varias veces portada en ‘El País’, además de aparecer en artículos en medios internacionales como ‘The New York Times’, ‘The Economist’, ‘The New Yorker’ y ‘The Washington Post’, entre otros. Su nuevo trabajo, ‘Mal olor’, recientemente ganador del premio Finestres, verá la luz en castellano en este mes de marzo y los asistentes a COMICMED podrán tener acceso a ella en primicia.

Otro de los grandes nombres propios del festival es Benjamin Lacombe (París, 1982), considerado uno de los ilustradores más importantes del mundo, con un estilo muy marcado y personal que le lleva a concebir cada dibujo como una auténtica obra de arte: figuras pálidas, de grandes ojos y una mezcla de fragilidad y potencia visual.

Siguiendo con autores de gran nivel, el festival traerá por primera vez a España a dos creadores que, sin ser de origen mediterráneo, acuden con una obra cuya temática está muy presente en este mar y que, además, entronca a la perfección con los valores que promueve Tres Culturas de solidaridad, diversidad, inclusión y esperanza. Se trata de Victoria Jamieson y Omar Mohamed, que conversarán sobre la historia que les unió: la multipremiada ‘Cuando brillan las estrellas’, inspirada en las vivencias del propio Omar Mohamed en los campamentos de refugiados de Dadaab, en Kenia.

También habrá lugar para los cómics que dan el salto a la gran pantalla a partir del exitoso caso de Robot Dreams, el primer cómic de la escritora de libros infantiles Sara Varon que el director Pablo Berger plasmó en una inolvidable cinta que llegó a optar al Oscar como Mejor película de animación el pasado año. Ambos desgranarán los detalles de esta colaboración que ocupa un lugar de privilegio entre las producciones cinematográficas nacidas de un cómic.
Y si la historia de Robot Dreams viajó desde Estados Unidos hasta España para llegar al celuloide, el mismo trayecto, pero a la inversa, es el que realizan las obras de Natacha Bustos (nacida en Ibiza en 1981, aunque malagueña de adopción) y Carmen Carnero (Málaga, 1983), dos españolas que triunfan en Marvel y DC. La primera de ellas con cómics como Moon Girl and Devil Dinosaur, fue elegida por Marvel como una de las ocho artistas más prometedoras de la próxima generación en 2020; mientras que la segunda trabaja para esta misma compañía en exclusiva desde 2018, donde fue incluida en 2019 en el programa de artistas de élite de Marvel ‘Stormbreakers’.

Por último, cabe destacar a Wilfrid Lupano, (Nantes, 1971), con quien analizaremos libros como ‘La bibliomula de Córdoba’, del que es guionista, y en el que muestra el poder de la cultura y el conocimiento como barrera ante los totalitarismos. Además, será uno de los protagonistas de los talleres infantiles a partir de su obra ‘El lobo en calzoncillos’ en el apartado COMICMED KIDS, donde también se ofrecerá otro taller que aúna creación con nuevas tecnologías para la creación de videojuegos (en el Campus 42) y uno para público adolescente en el que Natacha Bustos mostrará cómo dibujar superhéroes.
En resumen, una programación diversa y heterogénea en la que se hablará mucho de cómic, pero también de nuevas técnicas de creación, universos digitales y fusión con otras artes. Una iniciativa en la que, además, se han implicado otras entidades e instituciones como el Centro Andaluz de las Letras, la Fundación Telefónica, el Instituto Francés y las editoriales Maeva, Edelvives, Norma Editorial, Apa Apa Cómics y Penguin Random House.
El acceso a todas las propuestas de este festival será gratuito previa inscripción en la página web de la Fundación Tres Culturas (www.tresculturas.org). Asimismo, los interesados podrán adquirir ejemplares en el punto de venta que habilitará la tienda Cómic Stores en el mismo festival.
Álbum Ilustrado
El colectivo de ilustradores e ilustradoras de Asturias se une en su Asociación Profesional

La Asociación de Profesionales de la Ilustración de Asturias se presentó en sociedad a finales del mes de enero, y lo hizo con una jornada con charlas profesionales y con la inauguración en el Museo Barjola de Gijón de la exposición ‘Somos APIAST: La ilustración contemporánea en 50 obras’, que permanecerá expuesta hasta el próximo 28 de febrero. Aprovechamos la ocasión para charlar un poquito más con Eva Rami e Isabel Muñoz, de la directiva de APIAST, sobre este proyecto.

¿Cuál es el objetivo de la Asociación? “Entre los objetivos de APIAST podemos destacar un par a modo de ejemplo: el de crear una comunidad de apoyo y asesoramiento, y el de defender los derechos de los ilustradores e ilustradoras, promoviendo su reconocimiento y trabajando colectivamente por un futuro más justo para la profesión”.
¿Con cuántos asociados/as ha nacido? “Comenzamos a madurar la idea de crear la asociación un grupo de unas 11 personas reuniéndonos de forma mensual durante dos años para preparar toda la organización interna necesaria para funcionar e iniciamos nuestra actividad en septiembre con 30 personas socias. A día de hoy rozamos ya las 70”.

Hacednos una pequeña valoración del panorama de la ilustración en vuestra comunidad. “Tenemos una cantera de ilustradores e ilustradoras muy potente en esta tierra. Cuanto más aumenta la red que estamos creando, más cuenta nos damos de que nos encontramos en plena ebullición y que la cosa, lejos de decaer, crece de forma exponencial. Tenemos personas socias que han trabajado para Netflix, Disney, Marvel, Vogue, Naciones Unidas, Unicef, además de para un sinfín de editoriales, asturianas, nacionales de renombre y, sobre todo extranjeras… Y tanto los ilustradores e ilustradoras más reconocidos como los que están empezando tienen un nivel impresionante. Hoy en día el teletrabajo marca la pauta, pero no es ni mucho menos la única situación que hay”.

Y sobre la exposición, ¿qué nos vamos a encontrar en ella? “La exposición se compone de 50 trabajos de ilustración, obras de las 50 primeras personas socias, sirviendo como muestra de la ilustración contemporánea asturiana. A través de ella, queremos enseñar la gran variedad de técnicas, estilos, colores, temáticas y clientes posibles. Cada artista escogió el trabajo que quería mostrar, pero se decidió que todas las obras compartieran el mismo formato para dar unidad a la exposición”.

¿Con qué técnicas que se reflejan en la misma y quiénes son las personas que exponen? “Las técnicas que más se repiten son la acuarela y el dibujo o pintura digital. Aunque también podemos ver técnicas de pastel o collage”.

Los Autores y autoras de la exposición son: Isabel Muñoz, Eva Rami, Enrique Fernández (autor de la imagen de portada de esta entrada en el blog), Ana Reguera, David A. Palicio, Cris Mencía, Marco Recuero, Nuria Álvarez, Montse Vega, Cinthya Álvarez , Angélica Rius, Nora García, Verónica Grech, Brezo Rubín, María Guija, Rubén Megido Cuinchi, Vendela Vrensk, Inés Martínez, Eva López, Guillermo Redondo, Luisa García, Rosa Martín, Quino Marín, Nanu González, Raquel Lagartos, Pablo Ballesteros, Óscar Vázquez, Julia Castaño, Bruno M. Tabares, Anxelu González, Angélica Chamorro, Goyo Rodríguez, Celia Pandiella, Clara Pergon, Diana Sobrado, Beatriz Llavona, Javier Rodríguez, Kiyary Do, Marina Saavedra, Alba Blanco Lobo, Ivor Arce Ormazabal, Sara Pérez, Paula Marco, Andrea Franceschi, Andrea Sotorrío, Vanessa Riesgo, Manuela Estevan , Ana Qu y Carolina Mattos.
Tenéis más información en la web de APIAST.
-
Álbum Ilustrado1 mes ago
Susana Rosique y la aventura de ‘Acuerdo bajo las estrellas’
-
Álbum Ilustrado1 mes ago
Diana Zela nos traslada a ‘Cuando eran como tú’
-
Álbum Ilustrado3 semanas ago
Silvia Álvarez y el homenaje a las madres de ‘Mamá’
-
Cómic1 mes ago
Carla Berrocal y el amor, la tragedia y la esperanza de ‘La tierra yerma’
-
Álbum Ilustrado1 mes ago
Luciano Lozano nos invita a seguir ‘La línea amarilla’
-
Álbum Ilustrado1 mes ago
Elena Val y la espera de ‘El hijo del astronauta’
-
Álbum Ilustrado3 semanas ago
María Pascual y Ana Garralón transitan ‘Calle de la Oca’
-
Álbum Ilustrado2 semanas ago
Torben Kuhlmann nos hace volar con ‘Earhart’