Sus imágenes no dejan indiferente a nadie, y ha encontrado en las redes sociales el vehículo idóneo para que la gente las haga suyas. Aparentemente sencillas y altamente inspiradoras, las ilustraciones de Spielkkind no dejan de sorprenderte. Con ellas nos topamos en las redes, y como siempre quisimos saber un poco más sobre lo que había detrás de esas imágenes. Nos encontramos a Kerstin, que amablemente nos ha contado cómo surgió todo…
“A finales de 2013 puse algo sobre un papel y dibujé por primera vez. Después subí la imagen en Instagram. Utilicé una galleta, y junto a ella esbocé un árbol. En mi imagen interior la galleta se había transformado en un pequeño hombre corriendo. A partir de entonces, se pueden encontrar imágenes así aquí y allá, en mi galería de Instagram, creadas utilizando sólo esa técnica. Más tarde empecé a usar el hashtag #and_draw_something para estas imágenes en concreto. Igual que la gente sube fotos “normales” a Instagram, yo siempre he tenido debilidad por el minimalismo. Sólo tomo instantáneas de cosas que me parecen fascinante de una manera u otra. Puede ser un limón cortado en rodajas, un muñeco que pertenece a mi hijo o simplemente un paisaje en miniatura”.
“La imagen que se acerca más al estilo que hoy desarrollo y que creo que es la madre de todos los acontecimientos que han venido después, es una imagen de una caja de fresas, con una fresa que falta en el medio. En primer lugar me encantó el aspecto de la caja llena, estaba entusiasmada con la simetría y la estructura de las fresas. Puse la caja en una hoja de papel en blanco y tomé una foto. De repente me vino a la cabeza una visión, algo así como “¿Qué tal una pequeña figura descarada que roba una de las fresas e inocentemente dice después: Yo no lo hice”… Intenté un par de cosas, dibujé un par de figuras simples, le puse largas orejas y añadí dos pequeños cuernos en la cabeza y, de repente, mi pequeño monstruo fue creado”.
Después de esto mi creatividad y yo no podíamos parar, era como si una puerta se hubiera abierto dentro de mí y surgió una avalancha de ideas. Cualquier cosa que veo y escucho me inspira. Un objeto que me gusta, una flor, algo que comer, una frase que alguien me dice … toda una avalancha de imágenes asociadas con esto viene a mi mente”.
Las imágenes que hago no están todas creadas de la misma manera. A veces veo algo y enseguida tengo una asociación que puedo poner en un papel en el acto. Otras veces veo algo y sé que quiero para incorporarlo en una imagen, pero no tengo la imagen adecuada en la cabeza de inmediato, por lo que necesitaré probar para crear el plano correcto. Cada idea no acaba en Instagram, y muchas veces puede ser un proceso extenuante hasta la imagen final. Tengo que superar obstáculos técnicos de vez en cuando. La mayoría de las veces hago un disparo de prueba a una imagen que ya tengo en mi cabeza. Es la idea buena, ¿es factible? ¿Puedo gestionar el dibujo? ¿Hay algo que tengo que cambiar? Tan pronto como el disparo de prueba se realiza me pongo a trabajar en la imagen final. Tomo una nueva hoja de papel blanco, dibujo según la prueba anterior, dispongo el objeto y tomo las fotos necesarias con mi iPhone hasta que todo esté exactamente a mi gusto. La mayoría de las veces le pido a mi marido que eche un último vistazo a la imagen. Él es mi control de calidad final. Después de eso añado mi marca de agua “spielkkind” y está listo para ser subido”.
“He aprendido que el camino en el que estoy, en el que la imagen que tengo del mundo que me rodea no es realmente así, comenzó cuando yo era una niña. Veo cosas que no son reales, pero que son muy reales en mi cabeza. He aprendido que puedo crear diminutos mundos de fantasía mediante la utilización de mi ‘ojo’ interior. Dentro de mis fotos puedo hacer esos mundos visibles. Juego con las cosas que me rodean. Así es como surgió mi etiqueta “spielkkind” (un juego de palabras que contiene la palabra alemana “Spielkind”, que significa jugar como un niño, y a la que agrego una “k” extra por mi nombre de pila, Kerstin). A través de la publicación de mis fotos en Instagram y ahora también con el intercambio con muchas personas diferentes, me he dado cuenta de que en la mayoría de nosotros tenemos un niño interior que quiere divertirse, algo que me parece increíble”.
“Yo trabajo con papel blanco simple, un ‘fineliner’ negro y utilizo exclusivamente mi iPhone 4S con algunas aplicaciones. Me gusta mucho el carácter artesanal que le da a a mis fotos. Con mi iPhone tengo todo lo que necesito en una mano, no necesito mucho para poner mis ideas sobre el papel. Adoro la fotografía móvil, simplemente porque es auténtica y no es perfecta, pero me está dando un sinfín de oportunidades”.
“Instagram fue la chispa que lo encendió todo. Antes de que yo usara esta aplicación nunca había hecho ese tipo de fotos o ilustraciones. Usando Instagram (al principio sólo de vez en cuando, más tarde cada vez más), he creado imágenes donde usaba papel blanco y combinaba cada día cosas como flores, alimentos o similares, con las líneas del boceto. Hace unos dos años sentí que algo pasó dentro de mí. Una enorme avalancha de creatividad, literalmente, se apoderó de mí y de las imágenes, que normalmente sólo tenía en mi cabeza, y que cobraban vida a través de este estilo especial que había desarrollado. ‘No puedo parar’ es el nombre de una de mis fotos de aquel entonces (una jirafa que surgía de un tulipán). Sin Instagram nunca habría llegado a mis ideas y nunca habría sabido cuánta creatividad había dentro de mí”.
“Mi último proyecto es mi tienda online en ‘Dawanda’ donde vendo pequeños imanes con mis ilustraciones. En el futuro quiero ampliar los productos spielkkind, como postales o fotografías enmarcadas. Pero hago todas estas cosas paso a paso, porque mi vida está llena de otras grandes cosas. Un pequeño libro es uno de mis grandes sueños, pero en este momento es algo que parece estar muy, muy lejos”.
Más información en la página web de Spielkind y en su perfil de Instagram.
whimsical inside. from Uli Hiestermann on Vimeo.