“Miradas” es un poemario que se acerca al cielo, al mar y a la tierra con una mirada cómplice, diáfana y divertida. Son versos que hablan de la naturaleza y de nuestro entorno más cercano, aunque a veces invisible: el arco iris, las olas o las grúas. Una vez más, Lola Casas despierta los sentidos y hace volar la imaginación de los niños y no tan niños. Una interesante propuesta de poesía ilustrada con las delicadas acuarelas de Pere Cabaret.
De la mano de este ilustrador hacemos un recorrido por este pequeño gran libro, que pertenece a la colección Picnic +8 de la editorial Almadraba Infantil y Juvenil.
“Llevo trabajando muchos años con la escritora y poeta Lola Casas -nos cuenta Pere-. Juntos, hemos publicados 12 libros en diferentes editoriales. ‘Miradas’ era un proyecto personal de Lola. Ella quería hacer un poemario en castellano y que yo lo ilustrara. Durante estos últimos años, los dos hemos mantenido una relación laboral y de amistad muy estrecha, cosa que nos facilita el camino a la hora de trabajar. Compartimos muchas afinidades en cine, música y teatro… El entendimiento hace que el trabajo se torne a la vez interesante y cómodo”.
“’Miradas’ es un poemario donde el cielo, el mar y la tierra son los protagonistas. Lola, de manera muy descriptiva, presenta en su poesía su particular visión de estos elementos. Con mis dibujos, a partir del color y el trazo, he intentado interpretar sutilmente -aportando mi visión personal- lo que explica y muestra cada una de sus creaciones poéticas”.
“Pretendo que mis dibujos sean espontáneos y de trazo rápido. Intento que éstos sean una segunda lectura visual de los poemas. Esta reinterpretación hace que el libro sea más rico en contenido y también más sugerente tanto para los niños como para los adultos”.
¿Están estas ilustraciones en la misma línea del resto de tus trabajos? “Es diferente en cuanto a la técnica, pero en el concepto es el mismo. Me refiero al trazo libre y la manera de dibujar mis personajes (con los rasgos del rostro que les caracteriza, por ejemplo). Para mí es muy importante que mi trabajo tenga una unidad. La gente que sigue mi trayectoria reconoce mis ilustraciones al verlas”.
“En ‘Miradas’ me decidí por las acuarelas combinadas con rotuladores en el trazo de los perfiles. Utilizo muy poco el Photoshop. Solamente recurro a él para escanear y subir resoluciones del color. Me siento cómodo improvisando con los colores. Utilizar las manchas y el error, es parte de un juego muy interesante”.
“Es la primera vez que aparece en el mercado un trabajo mío en acuarelas. En libros anteriores he trabajado con ceras, collage o rotuladores… ‘Miradas’ es un nuevo experimento”.
¿Cómo fue el trabajo de elaboración de este proyecto? “Todo un reto. Hacía un montón de años que no abría mi caja de acuarelas. Emborronar el papel y apreciar lo que sugiere la mancha en relación al poema se convierte en un juego. Es la mejor manera de desbloquearte y romper el miedo al blanco del papel. Lola participa activamente en la elaboración, en el proceso creativo. A mediada que los voy realizando, le voy mandando los dibujos y ella me presenta ideas constructivas que siempre ayudan a redondear mi creación”.
¿Qué opinas de la situación del mercado o de la industria de la literatura infantil y juvenil? “Vivimos una situación difícil para los ilustradores, autores y para toda la sociedad en general. El mundo editorial no está pasando buenos momentos. Estamos en una época donde te tienes que reinventar y buscar la manera de estar activo aunque la compensación económica sea dificultosa. En editoriales pequeñas surgen buenos proyectos que se deben aprovechar.”
“Ahora estoy trabajando en varios proyectos en los ámbitos de la música, el teatro y la docencia. En cartera tengo 3 libros de Lola Casas para ilustrar. El primero lo publicará, en el próximo mes de abril, la editorial ‘El Cep i la Nansa’. Esta será mi tercera colaboración con esta pequeña editorial”.