Cómic
Kenny Ruiz y la metáfora de Cira ‘Dos Espadas’
Norma Editorial nos invita a conocer a ‘Cira Dos Espadas’ en una nueva edición integral. Una nueva edición, revisada y remasterizada, de este manga de capa y espada lleno de acción obra de Kenny Ruiz. Pese a su habilidad con el acero, su baja cuna y su relación con una banda de ladronzuelos le impiden entrar en la elitista Escuela Unicornia para convertirse en una Primera Espada. Pero ella no piensa cejar en su empeño, aunque un fortuito encuentro con dos espadachines salidos de las leyendas cambiará su destino para siempre… y pondrá a todo lo que ama en peligro de muerte. Así nos presenta la editorial esta edición integral. Hablamos con Kenny Ruiz de este y de otros de sus trabajos.
¿Cómo nació este personaje? “Cira. El personaje principal de ‘Dos Espadas’ es una traslación de mi personalidad como dibujante, pero contado en calidad de esgrima. O sea, a mí me apetecía o necesitaba, más que me apetecía. Necesitaba explicar el proceso que yo estaba siguiendo en aquel momento de intentar dibujar cómics como a mí me gustaba dibujarlos, pero adaptarme al formato, a la industria del cómic franco-belga, que estaba muy lejos de lo que yo quería hacer. Entonces, creía que podía hacer algo interesante en esa industria, pero no sabía muy bien cómo”.
“Y esa incertidumbre me parecía interesante de tratar, de trasladarla de alguna forma para, primero, yo explorarla, a ver qué sentía yo en todo eso e intentar sacar algo en claro -continúa Kenny Ruiz-. Porque creo que muchas personas se sentirían igual, intentando ser ellos mismos, pero al mismo tiempo adaptarse a lo que la gente les exige. Pensé que era un sentimiento muy global. Me parecía guay hablar de eso. Pero iba a ser bastante aburrido si contaba la vida de un dibujante. Entonces, encontré una metáfora a través de la esgrima. Y, en realidad, lo que le pasa a Cira de tener un estilo mezcla de un montón de cosas, pero aspirar a ser una gran esgrimista, una primera espada, en un mundo en el que le exigen ser diferente, explicaba bastante bien lo que yo estaba sintiendo. Así que, en realidad, Cira era mi traducción al mundo de la épica”.
¿Qué se van a encontrar los lectores en esa edición integral? “Es toda la serie que hice hace diez años, entre 2014 y 2017. Hice cuatro tomos de la serie que cuentan dos arcos completos de la aventura de Cira. En ‘Dos espadas’ podemos seguir al personaje desde que comienza, desde que tiene su llamada a la aventura. Y encuentra su camino y cómo se desarrolla, va creciendo como esgrimista.Y, en el segundo arco, cuando se enfrenta al peor de sus miedos. El segundo arco, que sería el cuarto tomo, el final de este cofre, cerraba una etapa muy fuerte de Cira. A mí me hubiera gustado que la serie continuara, pero la vida… Así que se quedó solamente en eso. Si compras el cofre que ha sacado Norma editorial ahora, tienes la totalidad de la historia que yo pude dedicarle a este universo”, nos cuenta Kenny Ruiz.
A la hora de trabajar, ¿qué técnicas utilizaste para la historia de Cira? “Toda esa época fue pre Clip Studio, entonces yo trabajaba en papel. Aquí yo estaba entintando con rotuladores Unipin y en A3, con un montón de páginas, y trabajaba con Rubén Candel, que es un gran ilustrador y siempre me ha hecho de asistente, que en aquel momento tenía mucho más trabajo que ahora, porque escaneaba las páginas, ponía líneas cinéticas, los diálogos… Al ser trabajo material, había mucho trabajo de preparación de la página, que lo hacía Rubén y venía a mi casa y nos pasábamos toda la tarde entintando y poniendo música y jugando videojuegos, pero sobre todo muy concentrados. Y lo que intenté con ‘Dos Espadas’ fue trabajar al ritmo japonés”.
“En aquel momento yo quería aprender a hacer manga como lo hacen los japoneses y sabía que una de las grandes exigencias es que allí se trabaja mucho más rápido que en Europa, así que yo me autoimpuse hacer un tomo en cuatro meses, que era el tiempo que se suele tardar en un manga -confiesa Kenny Ruiz-. Y así lo hicimos. Pero todo en papel y muy sufrido, pero muy contento con cómo quedó, la verdad”.
“Ahora es totalmente distinto, claro. Ahora cambio… Clip Studio es un software que en aquel momento estaba en proceso y cuando ya creo que maduró, digamos, ha otorgado un montón de herramientas que hacen que el entintado sea muy natural y que la sensación se parezca mucho a la que tienes cuando estás entintando en papel y agiliza infinito los procesos más técnicos. El entintar y el dibujar sigue siendo igual, tienes que hacerlo tú y no hay atajos, pero las líneas cinéticas, los bocadillos, el marco de página, estas cosas que nunca piensas en ellas cuando estás formando, en realidad se llevan muchísimas horas de trabajo. Y con software las hacemos más rápidas. Y la situación de la industria ahora exige ser muy rápido. Así que me pasé al dibujo digital y a este software y desde entonces todo lo hago así”.
¿Cómo fue el trabajo de documentación para este trabajo? “Muchísimo, sobre todo porque yo no diferencio la documentación del proceso creativo. La documentación forma parte, porque cuando me voy documentando voy descubriendo cosas que generan nuevas ideas. No trabajo creando un guión y una vez que está sólido busco las cosas que necesito, sino que mientras que estoy escribiendo voy leyendo cosas, y esas cosas producen nuevas ideas -afirma Kenny Ruiz-. De hecho, con ‘Dos Espadas’ fue un caso muy emocionante porque en realidad con muchos de los personajes empezaba porque había encontrado una espada que me parecía preciosa y buscaba cómo se había hecho, a quién pertenecía, qué tipo de ejército. Recuerdo que me pasó mucho con los húsares. El sable húsar es muy bonito y es muy diferente de un sable de un tercio español o de un florete francés. Y al leer quiénes eran los húsares, cómo lo utilizaban, luchaban a caballo, este tipo de duelos, lo reconocí enseguida de películas que había visto como Barry Lyndon o Los Duelistas, donde aparece esa espada que me pareció tan bonita. Y ahora resulta que tiene toda una mitología detrás, y al documentarme sobre ella enriquece el personaje en el que estaba trabajando. Así que, sobre todo, yo creo que siempre me pasa, pero en concreto en ‘Dos Espadas’ la documentación era la escritura del propio guión”.
¿Qué nos puedes contar de tu trabajo en ‘Hijos del trueno’? “Sí, mi nueva serie, ya es la segunda vez que utilizo la mitología como herramienta porque ya estuvo en ‘Telemaco’, y con Los Pequetruenos, que yo creo que lo vamos a llamar así, ojalá en español pronto, pero en Francia se llama ‘Fils du Tonnerre’, que es Los Hijos del Trueno, pues adaptamos los relatos nórdicos de la manera más fiel posible. Pero hemos encontrado que si te los imaginas protagonizados por niños de siete años en vez de por tíos brutacos y bien hechos, tiene más sentido. O sea, a diferencia de la mitología griega, la nórdica está llena de travesuras, toda la mitología nórdica son trampitas, engaños.…”, nos cuenta Kenny Ruiz.
“Entonces cuando empezamos a trabajar aquí, Toussaint y yo, en que queríamos hacer algo de mitología nórdica, él me propuso hacerlo con niños. Me dijo, es que yo creo que si son niños, tiene más sentido. Y yo tengo dos niños pequeños, entonces de pronto me cuadraba todo mucho. Y además me identifiqué mucho con Odín, que es el padre de todos y que está soltero la mitad del año porque su mujer está en otro lado y tiene que lidiar con todo esto. Y al principio yo quería llamarlo Odín padre soltero, pero al final aquí me convenció de que Thor fuera el protagonista. Así que lo estamos pasando muy bien porque en realidad son anécdotas mitológicas, pero tratadas con la ingenuidad de un niño”.
Y también me gustaría que me dieras alguna pincelada de este nuevo trabajo que hemos conocido del universo de Star Wars, lo que puedas contar. “Todos sabemos que estas grandes franquicias conllevan unas grandes responsabilidades. Pero es cierto… Claro, un gran poder. Pero es cierto que vamos a hacer un manga que se llama ‘Path of the Lightsaber’ y que escribo y dibujo, y que es todo lo que yo había soñado hacer en mi vida y que probablemente sea el cómic más interesante a todos los niveles que he podido hacer hasta ahora. La experiencia está siendo muy, muy motivadora y estoy muy, muy contento con cómo está quedando”.