Arte Urbano
Núria Alemany: ilustradora de palabras, poeta de la imagen
A Núria Alemany la conocimos en Barcelona, durante un foro organizado por la Asociación Del Álbum, dentro de la Semana del Álbum. Núria participó como ponente en el Foro. Hablamos de esta nueva sección del blog dedicada al arte urbano. En esa conversación se fraguó esta entrevista, que tiene su arranque en uno de los trabajos de muralismo de Núria, un mural de barrio.
¿Cómo surge ese proyecto? Núria Alemany: “Este proyecto surge mientras estaba haciendo otro mural en el barrio, reivindicativo y que resultará ser el precursor y concepto que da sentido a toda la obra. Plasmando una escena de la película de Spike Lee ,‘Do the right thing’, donde sale el personaje de Radio Raheem mostrando en sus manos la dualidad entre el Love & Hate (Amor y Odio). Mi intervención empezaba cuando interpreto la escena como la dualidad que en tiempos actuales veo reflejada de: Real o Fake (falso). Dando a entender esa búsqueda de la autenticidad en todos los sentidos y que hoy en día resulta difícil de captar”.
“Por ejemplo, la naturaleza nunca es fake: los árboles son como son, no pretenden ser otra cosa, las montañas no quieren ser unas más altas que las otras… En cambio, en cuestiones humanas, la gran mayoría de gente no se cuida de vivir desde su centro, sino que busca aprobación en los demás, fama, exhibirse como producto e intencionalmente no conecta con su parte más auténtica, sino que todo son artimañas para ganar dinero (cosa que no nos lleva nunca a esa búsqueda de la autenticidad) -continúa Núria Alemany-. Esa autenticidad es lo que yo quise reivindicar con ese mural. A partir de ahí, un par de vecinos me dijeron: ‘¿Por qué no continúas en la pared de al lado? Y yo pensé: “ok, no solo haré la pared de al lado, sino que terminaré toda la pared que hace esquina y que da toda la vuelta”.
“Para eso necesitaba ver hasta qué punto colaboraba el barrio conmigo, y entre sí, para que eso fuera posible. Tengo que decir que el hombre que me incitó a continuar el mural, murió por un accidente antes de poder ver la pieza acabada y por ese motivo el mural está dedicado a él donde el jarrón con flores pone: En memòria de Manolo”.
¿Qué has querido reflejar en este mural y dónde lo encontramos? “En el mural he querido reflejar la vida que dan los oficios en la zona de St. Pere de Galligants (barri vell Girona). La personalidad de éste y todo su carácter. Podría haber hecho una pieza para mí solamente, pero ya que pedí la colaboración de los negocios y vecinos para desarrollarlo quise pensar algo que reflejase toda su esencia. La escena, entonces, ocurre dentro de una casa cualquiera donde en el comedor, sala de estar, garaje y estudio de música hay cada uno de los oficios, aportando su valor en ellos: cada elemento tiene su importancia y su papel, desde el mueble hecho por el restaurador ‘Batlle’, hasta el vino del ‘Xiqui’ que hay en la mesa, pasando por la camilla del tatuador de ‘Asmodeo tattoo’, etc.”, nos cuenta Núria Alemany.
“La lista es tan larga como elementos hay en el mural. Además, se suman también los distintos perros del barrio que representan a vecinos que también quisieron aportar su granito de arena. En total hay más de 40 elementos identificativos que puedes ir encontrando y relacionando a lo largo del mural. Quise reflejar eso, y sobretodo, quise hacer un experimento sobre la capacidad de colaboración que podía conseguir en el propio barrio. Me sorprendió positivamente cómo fue recibida la iniciativa. Aprendieron y aprendí de todos ellos”.
Me gustaría que me hablaras de tu proceso de trabajo. No sé si sueles trabajar con algún boceto previo… “Siempre trabajo con alguna idea/frase previa en la cabeza que quiero comunicar. Parto de un concepto, de algo que tengo ganas de decir. Algunas veces hago boceto y otras parto de distintas imágenes que a la hora de ejecutar voy juntando improvisadamente. Lo importante es que tenga un sentido, más allá de lo estético, que haya mensajes y sobre todo que no sea evidente. Siempre intento jugar con el hecho de tener que descifrar o descubrir: hay que mirar más allá de lo que se ve a simple vista. Yo hace tiempo que encontré una frase que me define bastante bien y es: Ilustradora de palabras. Poeta de la imagen”, afirma Núria Alemany.
¿Con que técnicas trabajas? Y ¿materiales? “Puro spray. Me gusta el reto de conseguir lo que fácilmente haría con un pincel. La técnica del spray requiere de mucho control y precisión, ya que la herramienta conlleva un cierto poder y presión, a la vez que no permite mezclar fácilmente los colores. De pequeña me hacía yo misma los colores, no con pincel sino con ceras de colores. Pero el spray me divierte más y me permite pintar más rápido, nunca me aburre”.
¿Hay algo nuevo en este sentido en este trabajo respecto a otros? “Una de las cosas nuevas es que es totalmente autofinanciado. Fue una iniciativa propia en la que quería constatar si el barrio colaboraba y podía conseguir así este autofinanciamiento. En el fondo fue como un estudio en el que me propuse comprobar si realmente tenía sentido plasmar esa convivencia y conocimiento entre los que hacían del barrio un ente propio con carácter. Y así fue, cada uno se puso en su lugar”, asegura Núria Alemany.
¿Qué dirías que es lo más difícil a la hora de enfrentarse a una fachada en blanco? “Lo más difícil para mí, igual que lo es cuando escribo, es la impaciencia de tener la forma y la composición ya marcada en dicho canvas. Sea cual sea el tamaño. Necesito tener clara esa totalidad para luego perderme y disfrutar en los detalles de la misma”.
¿Y lo más satisfactorio? “Lo más satisfactorio de enfrentarme a una fachada en blanco es desvirgarla con el primer trazo. Es romper el blanco con la forma que agarra el color o la forma que agarran las palabras. Ahí empieza el viaje”.
¿Qué importancia tiene la colaboración con otras personas en la realización de trabajos de esta envergadura? “Depende del trabajo. En este caso, y al tratarse conceptualmente de un cuadro (muy grande claro), es como un reto que te pones a tí misma y para mí fue imposible trabajarlo con alguien, ya que lo tenía en mi cabeza y lo iba visualizando a medida que iba avanzando. No fue un trabajo en equipo aunque sí reflejaba todo un equipo de trabajo. En otras ocasiones la colaboración siempre es buena cuando hay las mismas ganas de dar y recibir a la vez. Each one teach one”.
¿Qué dirías que caracteriza tus trabajos en la calle? “El mensaje, siempre hay detrás un concepto -afirma Núria Alemany-. La estética se queda para mí en segundo plano en el sentido que puede agarrar un estilo u otro en función de lo que quiera comunicar. También está el hecho de lo escondido, lo descifrable. Siempre encubro mi nombre dándole distintos formatos o incorporándolo sutilmente en la escena. Te quedas un rato mirando la pieza y vas descubriendo cosas”.
¿En qué trabajas ahora? ¿Algún proyecto nuevo? “Ahora mismo estoy trabajando varios proyectos de graffiti y de rap dentro de la entidad que llevo ‘Heal Hop’ (@heal_hop / www.healhop.cat) y que da un sentido social a cada disciplina artística. Es arte comunicativo y transmite lo que es la cultura del Hip Hop: un trabajo que parte de un reto para el individuo y la comunidad. De hecho, acabo de sacar un ensayo que refleja varios aprendizajes teorizados a partir de 15 casos prácticos en ‘Heal Hop’. En ellos cuento cómo esa dimensión cultural del Hip Hop (a través de la búsqueda de referentes, de su creatividad e imaginación para proyectar y su revolución) permiten conseguir una mejora en la dimensión sistémica (factores contextuales, emocionales y psicológicos) de nuestros potenciadores sociales (individuos y grupos). Todos estos trabajos me ayudan a mejorar realidades y a hacer reflexionar a los adolescentes sobre aspectos de su vida que, de esta forma, son capaces de reinterpretar y positivizar a través de la creatividad en la educación”.
“El Hip Hop nace de las ruinas para salir de ellas y se convirtió en cultura por la interrelación entre sus componentes, por la falta de juicio y la creación constante des de la propia esencia y búsqueda de cada uno. Para que eso suceda, el individuo debe de estar en un momento en el que no tiene ni teme nada que perder y, a la vez, tener toda la fuerza para querer avanzar hacia algo totalmente desconocido, tanto personal como artísticamente”.