Hervé Tullet nos invita a una gran experiencia creativa colectiva

¡La pared es nuestra! Esto decía el título del taller que protagonizaba Hervé Tullet dentro de Ilustratour Familiar y eso es precisamente lo que ha pasado. Los asistentes al taller, niños y niñas pequeños, y niños y niñas grandes, se lo han pasado en grande.

Todo ha arrancado en la biblioteca, donde este “creador de libros” francés ha llegado con su maleta y de ella ha ido sacando y leyendo varios de sus libros. El juego con el público ha estado siempre presente, empezando por libros más antiguos, en una interacción con los niños a modo de eco de la voz de Tullet.

La gente se lo estaba pasando genial y ha llegado “Un libro”, que ha sido leído por una niña y “manipulado” por otra más pequeña. Mientras tanto, en medio de las dos, el director de orquesta, Hervé, disfrutando igual o más que el público con la historia de estos puntos de colores.

Pero la diversión sólo acababa de comenzar. De esa maleta plateada Hervé ha sacado un megáfono, sí, un megáfono, y se ha llevado a todo el mundo hasta una de las paredes de la nave del LAVA que acoge Ilustratour Familiar. Cada persona, ya daba igual que fueras niño o no (en el fondo todos lo seguimos siendo), ha cogido un vasito con pintura y un pincel.

A las órdenes del “general” la pared, sí, la pared, que hasta ese momento era blanca, empezó a llenarse de puntos y de círculos de colores. A su orden todos daban un paso al frente y “atacaban” con sus pinceles a la pared. Una nueva orden y un nuevo paso atrás. Y así hasta que la pared quedó completamente decorada. De especial diversión fue el momento “lanzamiento de pincel”. Hervé Tullet da la orden, y los pinceles vuelan contra la pared. Sencillamente espectacular.